La Clase G de Mercedes cumple 25 años
Sometida a continuas medidas de reestilización, la Clase G de Mercedes-Benz se ha mantenido siempre a la vanguardia de la tecnología. Coincidiendo con su 25 aniversario se incorpora al programa el G 55 AMG con motor V8 de compresor, un 8 cilindros de 476 CV y 700 Nm de par máximo.
Cuando salió al mercado se ofrecían cuatro motorizaciones con potencias de entre 72 y 150 CV y dos variantes de carrocería (Cabrio y Station Wagon) de batalla larga o corta. Hoy el programa consta de cinco modelos. Su base es el robusto bastidor en forma de caja formado por perfiles longitudinales y travesaños cerrados que garantizan una gran resistencia a la flexión y a la torsión. Sobre el bastidor se montan unos robustos ejes rígidos con resortes helicoidales de gran tamaño y largo recorrido de los elementos de suspensión, una configuración muy favorable para los desplazamientos en terreno escarpado.
Al mismo tiempo, su tren de rodaje garantiza un comportamiento seguro y confortable sobre firmes asfaltados.