El Rally Clásicos del Atlas en su décima edición se consolida como una cita imprescindible para los amantes de los clásicos y la aventura

No cabe la menor duda que la décima edición del Rally Clásicos del Atlas Solidario, que se disputó en el Sur de Marruecos coincidiendo con Semana Santa, ha cumplido todas las expectativas, tanto del equipo organizador, Teknisport Motor, como de los más de cincuenta vehículos inscritos, entre turismos y todoterrenos, que han tenido que enfrentarse a un recorrido muy duro y selectivo, con demoledoras etapas que desde un primer momento pusieron a prueba a los participantes que, además, tuvieron que hacer frente a unas condiciones climáticas marcadas por el intenso calor y las continuas tormentas de arena que añadieron un plus de dificultad a una prueba que ya era exigente de por sí.

En esta edición, y tras efectuar en la localidad marroquí de Meknes las protocolarias verificaciones, tanto administrativas como técnicas, en las que el equipo organizador comprobaba que tanto los participantes como los vehículos dispusiesen de la documentación en regla, así como del equipo necesario e imprescindible para afrontar con éxito una aventura de estas características, la caravana se desplazaba cruzando el Medio y Alto Atlas hasta la ciudad de Erfoud, donde quedaría establecido el centro de operaciones del Rally y desde donde se realizarían una serie de etapas en forma de bucle caracterizadas por la presencia de arena, así como de pistas rápidas y pedregosas, que desde un primer momento obligarían a los equipos a emplearse a fondo con un alto nivel de solidaridad y compañerismo, ya que en muchas ocasiones resultaría imprescindible la ayuda entre los participantes con el fin de ir superando una a una las diversas etapas.

Especialmente difícil y complicada resultó la quinta etapa, ya que a los pasos arenosos y zonas de dunas, donde uno a uno iban cayendo los turismos, e incluso algún todoterreno, hubo que unir una espectacular tormenta de arena que redujo considerablemente la visibilidad, complicando en gran medida el avance de los vehículos.

A todo esto se le sumó una carrera que coincidió en el mismo recorrido del Rally Clásicos del Atlas, de manera que los participantes tuvieron que compartir pista con espectaculares todoterrenos, buggies y camiones de competición, aumentando aún más el nivel de dificultad y teniendo la inolvidable experiencia de estar inmersos en una prueba tipo Dakar.

Tras la disputa de varias etapas en el desértico Sur de Marruecos, la caravana se trasladaba nuevamente hacia el Atlas, estableciendo en la localidad de Midelt el centro operativo, y donde se tendría que haber disputado la séptima y última etapa, la cual, debido al fuerte aguacero que cayó durante toda la noche, y atendiendo a razones de seguridad, fue suspendida por el equipo organizador, ya que todavía quedaban muchos kilómetros para poder regresar y la mecánica de muchos vehículos, después de un buen número de duras jornadas, se encontraba muy tocada, por lo que se realizó una improvisada entrega de premios y trofeos a los primeros clasificados que puso el punto y final a la décima edición del Rally Clásicos del Atlas, una prueba de solidaridad y aventura que ha dejado muy buen sabor de boca a todos los participantes, muchos de los cuales ya se prepararan para asistir a la edición invernal que, nuevamente organizada por Teknisport Motor en el desierto de Marruecos, tendrá lugar el próximo mes de Diciembre.