Renault muestra la nueva versión de su SUV Coupé Arkana, con ciertos cambios en diseño y añadiendo una versión deportiva Esprit Alpine
El Arkana se ha convertido para Renault en un superventas, pese a las dificultades de los mercados de estos tiempos. Desde su salida en periodo de pandemia hasta ahora, han sido más de 160.000 las unidades vendidas, y más del doble contando las ventas que ha tenido por mercados asiáticos, concretamente por Corea, rebautizado allí como Samsung XM3.
Como es habitual a mitad de ciclo de ventas, al ya hermano pequeño del Renault Rafale del que ya te informamos, tocaba ya un lavado de cara para continuar ese ritmo comercial, y seguir estimulando a los posibles compradores. La actualización responde a sumar al Arkana a la imagen de la marca recientemente presentada, con el nuevo logo (que se parece mucho al antiguo) en tono negro, la eliminación de los cromados en su exterior y otros detalles que le dan una mayor sensación de anchura.
El Arkana, con su concepto SUV Coupé, se hace más coupé que nunca con la versión Esprit Alpine, de la que toma el carácter y estética deportivos de la marca Alpine, otro de los miembros del grupo Renault.
En lo mecánico solo se ofertan mecánicas electrificadas. La más destacable es la híbrida autorrecargable (HEV) compuesta por motor de cuatro cilindros 1.6 de 94 CV, un motor eléctrico (49 CV) que propulsa al vehículo y un segundo eléctrico (25 CV) que hace de motor de arranque de alto voltaje. Con una potencia total de 145 CV, trabaja con una caja de cambios automática y una batería de 1,2 kWh, este Arkana puede circular el 80% del tiempo en ciudad en modo eléctrico siendo un 40 % más eficiente que un coche convencional.
Cuenta también con motorizaciones de hibridización ligera (MHEV) de 12 voltios de 140 y 160 CV y cambio EDC de doble embrague y siete relaciones.
Siguiendo la línea desde su lanzamiento, ninguna de las versiones cuenta con tracción a las cuatro ruedas, siendo todas ellas de tracción delantera.
